martes, 1 de noviembre de 2011


Es un pez reconocido por su boca pequeña, carnosa y prominente. Puede alcanzar una talla mayor a los 50cm de longitud, tiene unos dientes diminutos en los labios y los adultos son de color plateado con aletas de matices rojos o amarillos y escamas rugosas. Los machos son más delgados y esbeltos que las hembras. Es endémico, se distribuye en zonas bajas del río Magdalena, Sinú y Atrato.

viernes, 5 de agosto de 2011

BOCACHICOS LTDA

Bocachicos  ltda es una empresa de dicada a la comercialisacion de esta especie.



El bocachico o ‘Prochilodus magdalenae’, el pez migratorio que antes llenaba los ríos, lagunas y ciénagas del Atlántico, ahora escasea tanto que su diversidad genética se encuentra en serio peligro si no se consolida con urgencia un plan estratégico de manejo para la repoblación,Esta especie es uno de los patrimonios culturales más representativos de la región, pero últimamente al igual que el coroncoro y el bagre rayado ha estado afectada por la sobrepesca, la utilización de métodos inadecuados de captura, la contaminación de las aguas por desechos no tratados, la sedimentación a causa de la deforestación, la introducción de especies exóticas y, también, por el drenaje de cuerpos de agua o el tapado de los caños y quebradas que desembocan en el río, fenómenos que son comunes en las cuencas irregularmente manejadas.
Esta situación conduce a que el tamaño efectivo (25 centímetros) de las poblaciones de peces disminuya; a que sea notorio un proceso paulatino de reducción de la talla de los peces, y a que la endogamia sea una característica genética de la población; es decir, que son frecuentes y continuos los cruzamientos entre parientes cercanos, perdiéndose la variabilidad, señala.
El bocachico es un pez migratorio de agua dulce, y se puede encontrar tanto en ciénagas como en ríos, el desplazamiento que realiza lo hace con fines reproductivos y alimenticios, ésta última es bentónica aunque también puede alimentarse de concentrados en estanques de cultivos.
En el Atlántico, además del río Magdalena y las ciénagas aledañas, se halla en el embalse del Guájaro, en la laguna de Luruaco, en la ciénaga de Tocagua y en el Canal del Dique.Hoy, las comunidades han venido reemplazando el consumo estacional del bocachico por el consumo permanente de la tilapia plateada (oreochromis nilóticus) que ha venido extendiéndose por los cuerpos de agua cenagosas del Caribe colombiano y ha conservado en los mercados un precio accesible para los habitantes de menor capacidad de compra.
La disminución de la oferta de un bocachico nacional de buen tamaño ha ocasionado la entrada al mercado de un bocachico extranjero de menor calidad respecto al sabor.
BOCACHICO
es un plato típico de la Costa Caribe colombiana, más exactamente de Barranquilla y sus alrededores.1

Se prepara abriendo el pescado por el abdomen para sacarle las vísceras (quedando “abierto”), se rellena con verduras sofritas (cebolla, tomate, ají dulce y ajo), se envuelve en hojas de bijao, se amarra con pita y por último se asa al carbón.

Cabe señalar que al bocachico no se le puede desescamar ni quebrar las espinas a cuchillo (quedando “picao”) al comienzo de la preparación o adquirirse para tal fin ya “abierto y picao”, pues se desbarataría al asar. De ahí la gran cantidad de espinas de este extraordinario plato. El bocachico en cabrito se acompaña con yuca cocida o una torreja de bollo de yuca y guarapo.

















Características del Desarrollo Embrionario del Bocachico

El desarrollo embrionario del bocachico (Prochilodus reticulatus magdalenae) ha sido estudiado en Colombia a partir de 1967, cuando por primera vez se obtuvo su reproducción inducida en la Estación de Piscicultura Tropical C.V.M. en Soplaviento Atlántico, por el Biólogo Gilberto Toro García.

En 1973, el biólogo José Ma. Solano sistematizó la reproducción inducida, su desarrollo embrionario y larval. En 1981 los autores del presente trabajo obtuvieron su reproducción con la aplicación de gonadotropina coriónica y en 1983 se filmó su comportamiento y desarrollo embrionario.

La reproducción inducida o artificial exige algunos parámetros abióticos normales, similares a los que se registran, en el medio natural, como son entre otros: la temperatura, ph y la concentración de oxígeno disuelta en el agua.

Los huevos presentan una densidad superior a la del agua, son libres y no se adhieren a ninguna pared. En su medio natural son arrastrados por las corrientes y corren muy cerca del fondo. Si en algún momento llegasen a un medio de aguas represadas y permanecieran concentrados en un mismo lugar, el desarrollo embrionario se vería afectado y los huevos no eclosionan.

Recién fecundados presentan un diámetro de 1,5 a 2,0 mm., y va aumentando a medida que progresa el desarrollo embrionario. A los 30 minutos aparece el primer clivaje, a los 45 el tercer clivaje caracterizándose la estructura con la formación de ocho nuevas células. A esta altura el diámetro del huevo es de 3.5 mm.

A los 235 minutos, aparece el estado de gástrula. A los 420 minutos se observa la formación del embrión temprano, caracterizándose por el desarrollo de la región cefálica y caudal.

A los 500 minutos se hacen ostensible las primeras contracciones del embrión, las cuales van aumentando hasta llegar a eclosionar. Con la región cefálica y caudal golpea la membrana externa que lo protege. Aproximadamente a los 960 minutos los embriones comienzan a eclosionar y las larvas presentan un largo total entre 4,0y 4,5 mm.


ALIMENTACION
En el Centro de Investigación Piscícola de la Universidad de Córdoba se realizaron dos experimentos; en el primero, el objetivo fue evaluar el efecto de diferentes presas en el manejo de la primera alimentación del bocachico Prochilodus magdalenae y en el segundo, con la mejor presa del ensayo anterior, determinar el tiempo mínimo de manejo de la primera alimentación. En ambos casos las post-larvas fueron sembradas a 50/L en acuario de 5 L. En el primer experimento se evaluaron las siguientes presas: nauplios de Artemia (NA), cistos descapsulados de Artemia (CA), zooplancton silvestre tamizado entre 125-160 mm (Z125-160) y zooplancton silvestre tamizado entre 250-400 mm (Z250-400), ofrecidas durante cinco días a razón de 5 Presa/mL. Además, un grupo de post-larvas fue sometida a ayuno. Las mayores ganancias de peso y longitud total la registraron las post-larvas alimentadas con NA (2.0+ 1.8 mg, 1.8+ 0.9 mm) y Z250-400 (2.0 + 1.1 mg, 1.6 + 0.5 mm). La sobrevivencia de las post-larvas alimentadas con NA (73.2 + 10.7%) fue mayor a las registradas en los demás tratamientos (P < 0.05). La baja sobrevivencia de las post-larvas alimentadas con Z250-400 mm (49.9 + 23.8%) se debió a la mortalidad ocasionada por la presencia de copépodos predadores en el zooplancton ofrecido (Mesocyclops sp, Thermocyclops decipiens). El pobre crecimiento de las post-larvas alimentadas con Z125-60 (0.8 + 0.4 mg, 1.1 + 0.2 mm) y CA (0.5 + 0.9 mg, 0.7 + 0.5 mm) fue debido en el caso del zooplancton porque resultó pequeño para la abertura bucal del bocachico (671 + 12.8 mm) y por tanto ineficiente en el balance energético; mientras que en el caso de CA este se comportó como un alimento inerte que no estimuló su consumo. En el segundo ensayo se ofreció NA durantes diferentes periodos: 1, 3, 5 y 7 días, a razón de 5 presas/mL. No se observaron diferencias significativas en la sobrevivencia final entre los diferentes tratamientos; la cual osciló entre 86.0 + 9.8% (1 día) y 91.1 + 7,7% (3 días). Las post-larvas alimentadas por 7 días presentaron la mejor ganancia en peso (5.3 + 3.8 mg) y ganancia en longitud (2.8 + 1.6 mm). Las post-larvas alimentadas entre 3 y 5 días no presentaron diferencias significativas en la ganancia en peso (P > 0.05). Mientras que la tasa de crecimiento específico (G) osciló entre 17.1 (5 días) y 22.3%/día (3 días), sin observarse diferencias estadísticas significativas (P > 0.05). Las post-larvas alimentadas durante 3, 5 y 7 días presentaron las mejores sobrevivencias (92.2 + 6.2, 93.3 + 4.3, 95.6 + 3.9% respectivamente) cuando fueron sometidas a la prueba de resistencia al estrés. Las post-larvas alimentadas por un solo día mostraron la menor sobrevivencia al ser sometidas a esta prueba (87 + 1%).


Los resultados del estudio sugieren que nauplios de Artemia o zooplancton silvestre en le rango de 250-400 mm, libre de predadores, son presas adecuada para el manejo de la primera alimentación al menos durante 3 días antes de ser sembradas en estanques en tierra.